El Club de Filosofía Práctica "MeditAcciones" tiene como objetivo crear ámbitos de reflexión, intercambio y estudio sobre la propia vida en relación con el mundo.

La Filosofía Practica ayuda a reflexionar sobre la propia vida y el mundo en que se vive. Queremos ampliar nuestras posibilidades de acción y nuestra libertad.

 

Los miembros del club nos hacemos partícipes de los siguientes principios:

  1. La ubicación del ser humano como valor y preocupación central.
  2. La afirmación de la igualdad de todos los seres humanos.
  3. El reconocimiento de la diversidad personal y cultural en el mundo.
  4. La tendencia al desarrollo del conocimiento por encima de lo aceptado o impuesto como verdad absoluta.
  5. La afirmación de la libertad de ideas y creencias.
  6. El repudio a la violencia.
El objetivo de los clubes es dar a la filosofía el sentido práctico necesario para poder afrontar el momento histórico que nos ha tocado vivirHaz click para twittear

En estos tiempos, donde la aceleración de acontecimientos toma un cariz vertiginoso; donde los pueblos, cada vez más asfixiados, caminan hacia la fuga, el sinsentido o la explosión irracional; en esta época de crisis, de cambios, es necesario acercar la filosofía a la realidad vital y cotidiana.

Son momentos de urgencia en los que se está jugando el futuro de una nueva civilización mundial a la altura de los tiempos. En este contexto, el ser humano de hoy tiene dos opciones:

1.- Adoptar la posición mecanicista propiciada por el actual modelo socioeconómico neoliberal que concibe al ser humano como objeto consumidor / productor, sin intencionalidad transformadora;

2.- o apostar por el desarrollo de la intención y la libertad humanas, ampliando, día a día, su capacidad de acción y transformación, en una dirección posible que dé sentido a la existencia.

La primera opción conduce al individualismo esquizofrénico, el nihilismo y la violencia. La segunda postura lleva a hacerse cargo de uno mismo y de la propia circunstancia, a elegir las condiciones en que uno quiere vivir. Y, por cierto, a la concreción de una nueva interpretación del ser humano que se liberta de las condiciones establecidas, que se hace cuestión de la realidad que vive, y que se hace protagonista de su propio futuro.

Por supuesto, los clubes adoptan la postura humanista. En ese sentido, cualquier cambio posible debe partir del ser humano concreto, es decir, tiene que ser un cambio personal y social.

En este punto, consideramos que la filosofía puede jugar un papel importante convirtiéndose nuevamente en una práctica.

Practiquemos la filosofía: Desarrollemos elementos que nos permitan ponernos en contacto con nosotros mismos, con nuestros propios mecanismos del pensar, sentir y actuar. Proporcionemos herramientas que ayuden a interpretar y comprender la realidad de un modo más amplio, crítico y coherente. Finalmente, ayudemos a establecer los prerrequisitos necesarios para que todos los campos del quehacer humano puedan orientarse en una dirección más reflexiva y constructiva.

Participación

Participar de las actividades de los clubes no precisa mayor requisito que el que se establezca autónomamente en cada club de filosofía práctica. En cualquier caso, la creación de un club implica la aceptación de estos Principios y Funcionamiento de los Clubes de Filosofía Práctica que establecen unos parámetros mínimos de estilo y acción.

Los clubes de filosofía práctica se organizan descentralizadamente sin necesidad de reglamentos, fondos económicos ni locales.

Cualquier persona puede crear un club de filosofía práctica siendo la única condición indispensable la aceptación explícita de esta declaración de principios.

Por otro lado, recomendamos, como actividad mínima y básica, la realización de reuniones periódicas entre los miembros del club así como la creación de un elemento de difusión del mismo.

Aceptación de Principios

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Propuesta de acción

Las actividades de los clubes están abiertas a la libre interpretación y creación autónoma de sus respectivos miembros dentro del marco establecido en los Principios de funcionamiento. Por nuestra parte, recomendamos como criterio mínimo de acción las reuniones periódicas y algún medio de difusión o conexión con el medio que nos rodea.

Respecto a las reuniones: Sugerimos que se estructuren en dos partes diferenciadas. Una parte de reflexión e intercambio y otra parte de aplicación social donde proponemos una acción en el mundo resultado de la meditación anterior.

En todo caso, las reuniones deberían servir para que cambiase algo en nosotros y eso se reflejase en el mundo.

Aquí van algunos modelos que pueden servir como inspiración: